LIBERTAD FORZADA

Como cuando se engorda a un cerdo durante todo un año para al final comérselo… les daré un indicio de sobre qué trata este escrito, nosotros somos los cerdos.

Estos indefensos animales, que para muchas mentes de personas demasiado comunes son de aspecto rosado y redondo, no saben lo que les espera; ellos piensan que los alimentan con amor y que les tienen un gran aprecio, así somos nosotros.

Todo comienza cuando somos pequeños inocentes e ignorantes, nuestros padres; para quienes ya es demasiado tarde, nos llevan a lo que la mayoría del mundo llama “Escuela o Colegio”, yo prefiero llamarlo Cárcel Educativa, Lugar de los lamentos o el castillo de las torturas invisibles, bueno etc.

Supuestamente en ese lugar nos van a “Educar”  y a “Enseñar”, pero no es así, allí solo hay cadenas en forma de timbre, picas en forma de lápices, jaulas en forma de salones y guardias…ellos tienen forma de profesores, no todos quieren ser guardias, pero como para ellos ya es demasiado tarde, les toca.

Durante nuestra estadía en esta “Escuela”, nos enseñan cosas que nunca utilizaremos, nos enseñan lo que ellos necesitan que aprendamos, nos enseñan lo que saben que vamos a utilizar ¿Cómo saben que vamos a utilizar? Porque ellos nos preparan, prácticamente nos entrenan como si fuera una escuela militar, nos entrenan para que al final, cuando llega el día de salir de aquella cárcel…perdón de aquella escuela, el día llamado grado, este día saldremos y supuestamente seremos “Libres”; pero no es así, ellos saben qué haremos, que iremos a buscar y donde lo buscaremos, por eso lo comparo detenidamente con un entrenamiento, nos prepararon para salir a servirles.

Es como un bucle sin fin, un círculo vicioso, este cuento de terror solo se convierta en una historia happy, cuando estos cerdos, que están engordando, aprendan a caminar y no no recibir todo lo que les dan de comer.

Ah, por cierto, “Ellos a quienes tanto he mencionado, se les conoce como “Sistema Educativo”.